El efecto de la soja sobre la producción agrícola: ¿desplaza o no?

Uno de los efectos del conflicto con el campo es que todo el mundo ha empezado a discutir sobre cuestiones relativas a este sector. Las retenciones y sus efectos, si bajan o no bajan los precios de los alimentos, la rentabilidad del sector agropecuario, la renta diferencial de la tierra. Quizás el tema más predominante ha sido el rol de la soja: ¿alimenta o no? ¿puede ser considerada un reemplazo de la carne? ¿se exporta o se consume internamente? Y muchos otros interrogantes. En muchas discusiones con amigos, compañeros y conocidos surgieron argumentos que pueden ser resumidos en la siguiente afirmación:

“Es falso que la soja desplaza a otros cultivos, porque hay rotación de cultivos”.

Intentaremos ocuparnos de de la primer parte de la afirmación, dejando en suspenso la segunda. Vamos a armar un ejercicio sumamente simple y casi casi a las apuradas (pero hasta cierto punto, esclarecedor), a partir de las “Estimaciones Agrícolas” de la Secretaría de Agricultura Ganadería y Pesca.

Veamos la evolución de la participación porcentual de la soja en la superficie cosechada argentina:


Fuente: Estimaciones agrícolas, SAGPyA (www.sagpya.mecon.gov.ar)

Claramente la participación de la soja se hace en desmedro del resto de los cultivos de la soja. Pasa (con una tendencia casi casi ininterrumpida) de representar el 19,61% (1990/ 91) de la producción total de la argentina al 47,64% en 2005/06.

Sin embargo, argumentan nuestros interlocutores:

“Esa participación porcentual no prueba por sí misma que se estén desplazando cultivos. Podría estar sucediendo que la superficie del resto de los cultivos se está incrementando, pero a un ritmo menor que el de la soja.”

Traducción: todos los cultivos se expanden, solamente que la soja lo hace más rápido.

Veamos: para intentar poner a prueba esta afirmación calculamos promedios trienales y luego para resumir y que sea más fácil evidenciar este fenómeno hemos calculado algo así como la “elasticidad cultivo/ soja”, a la que definimos como la tasa de variación del cultivo x, dividido la tasa de variación de la soja, entre dos períodos trienales.

La idea es proveer un indicador de cuanto se incrementa (o disminuye) la superficie cosechada de algunos cultivos y relacionarla con el movimiento que expresa la soja. Es decir, nos estaría indicando en cuantas hectáreas se incrementa la superficie del cultivo x, cuando se incrementa una hectárea de soja (y viceversa, cuanto retroceden). Tasas positivas implican crecimientos positivos, sea porque se incrementan soja y el cultivo x, sea porque ambos retroceden. De cualquier modo, aclaramos que en nuestro caso, la soja nunca presenta tasas de variación negativas, razón por la cual una tasa negativa en las elasticidades calculadas corresponderá a un retroceso del cultivo x.


Fuente: Estimaciones agrícolas, SAGPyA (www.sagpya.mecon.gov.ar)

Hemos marcado en rojo los períodos para que los que se observa tasas negativas. Son la mayoría de las celdas del cuadro.

Ahora bien, veamos el “Total (sin soja)”: resulta interesante: a partir del período quinquenal 97/98 02/-03: el total de la producción agrícola comienza a mostrar evidencias de retracción ante la soja. En realidad primero observamos una desaceleración clara de la relación pasa de 1,49 a 0,08. Luego se torna directamente negativa. Es decir que pareciera que por cada hectárea sembrada de soja que se incorpora al cultivo, se retraen 0,33 del resto de los cultivos.

Hemos ordenado los cultivos con cierto criterio: primero tenemos lo principales cultivos de la región pampeana (y los más importantes en términos de volumen y superficie). Luego, algunos cultivos regionales e industriales importantes y luego, el resto (una categoría “residual”).

En relación a los pampeanos: los más afectados parecen ser el sorgo y el girasol. El sorgo presenta elasticidades negativas en todos los períodos salvo en el 99/00- 94/95. El girasol se desacelera notoriamente en el mismo período y presenta tasas negativas a partir de ahí. El trigo y el maíz se ven menos sujetos a este desplazamiento, aunque evidencian un desaceleramiento importante.

Los cultivos regionales más típicos también se ven sumamente afectados por la expansión de la soja. El té y el tung son los que mayores tasas negativas presentan. La caña de azúcar (hasta el período en que aparecen datos en la SAGPyA) presenta elasticidades negativas a partir del período 94/95- 99/00. El algodón también muestra elasticidades negativas (de esto es un excelente ejemplo la provincia del Chaco, de la que ya nos ocuparemos en próximos posteos donde el reemplazo de soja por algodón es un fenómeno de “importancia provincial”) aunque parece evidenciar una recuperación leve hacia el período 00/01- 05/06. La yerba mate luego de presentar elasticidades moderadas (0,57 y 0,4) parece revertir esta tendencia y comienza a mostrar elasticidades negativas a partir de 97/98- 00.

En el período que incluye a la crisis de 2001 vemos que todos lo cultivos regionales (y la gran mayoría del resto de los cultivos del país, pampeanos y no pampeanos) presentan elasticidades negativas. En este período, la soja no solamente no retrocedió (con la única excepción de la campaña 2002/03), sino que ni siquiera se estancó y continuó su tendencia a la expansión de la superficie sembrada.

El resto de los cultivos también incluyen una cantidad considerable de “elasticidades” negativas.

En fin, el ejercicio que hemos abordado parece apuntar a la idea de que la soja efectivamente tiende a desplazar a otros productos, especialmente regionales e incluso a algunos productos típicamente pampeanos. Intentaremos, luego, estimar la pérdida de puestos de trabajo que resulta de estos movimientos.

Comentarios

Sirinivasa ha dicho que…
Estimado: Usted se sigue superando! Una muy buena idea lo de la elasticidad-soja.

Cada vez que leo sus posts me pongo medio colorado, me hace sentir la exposición de mis numeritos como berretona.

Es un aliciente a mejorar la presentación de lo que uno hace. Enhorabuena.
Mariano T. ha dicho que…
El tema es que la estadística sin validación a campo puede llevar a error.
(cuando digo campo no me refiero a agro)
Lo digo por el temarelaciones causa-efecto. Por ejemplo cuando hablan de te y tung, no es la soja los que lo reemplaza, Pero si hablamos de sorgo y girasol no cabe duda que si.
Y en el tema algodón la cosa es mixta. La soja peuede ser como esas hierbas y arbustos colonizadores que vienen cuando algo se abandona.
El algodón bajó el precio y se abandonó. daba pérdida. Dejamos las tierras ociosas? Al proncipio puede ser,pero eneguida "aunque sea echale soja", y ahí esta el reemplazo. Ahora el algodón parace que vale, y se estan recuperando las hectáreas. La macana es que ahora el algodón no avanza si no es con cosecha mecánica.
Cresto ha dicho que…
Siri, se agradece y tampoco se haga el humilde, que de falsa modestia estamos llenos...

Mariano: lo de la relación "causa- efecto" corre por tu cuenta. Yo hablo de que mientras uno se incrementa, el otro no lo hace o se retrae directamente. Sin embargo, si uno tiene en cuenta que esto es una tendencia de los últimos 10 años (si no antes)... y me parece que uno se puede jugar un poco con las "conclusiones"...

Ahora, ¿a que te referís con que en el te y el tung no es la soja lo que los desplaza? Ojo, quizás tengas razón, porque yo no aclaré (al menos de forma bien explícita) que un análisis regional, conduciría a algunas modificaciones en el planteo. Si es así, entonces rectifico y lo digo: "un análisis regionalizado de este fenómeno, segurmente conduciría a matizar resultados".

Lo del algodón: mira, el caso del Chaco (en algún momento subo algo) es violento: si en 1960 la producción del aldodón era el 25% del total, en 2002 no llega al 1%. Y en pleno auge y recuperación apenas si llega a los valores previos a la crisis del algodón de los '70. Mirá, si ahí no hay desplazamiento, no se donde hay.

Un abrazo.
Mariano T. ha dicho que…
El causa-efecto corre normalmente por cuenta del que lo lee, pero las correlaciones deben ser hechas entre cosas que pueden tener causa efecto, en realidad se hacen para demostrar una conclusión a la que uno llegó por observación. Sino puedo correlacionar los metros cuadrados habilitados de shopping con la tasa de desempleo, y si meto los 90 la correlación puede ser alta, y no dice nada.
La crisis del algodón fue una crisis de la gran flauta, provocada por los subsidios yankis a sus exportaciones de algodón, y al alto costo en dólares de la cosecha manual. Recién en 2007 empezó a reaccionar la producción. los rindes de soja son bastante bajos en el chaco, y el algodón debería volver por las suyas si se domina el tema del picudo (una nueva plaga) y hay buenos precios. El otro tema a solucionar es como le rompen el culo al productor las desmotadoras, pero eso es muy largo de hablar.
Cresto ha dicho que…
Mirá, si uno tomara los metros cuadrados de shopping como un indicador de algún proceso de incremento del consumo suntuario de ciertas capas sociales... a lo mejor no es tan desacabellada la correlación...

Hablando en serio: lo de Chaco, todo lo que decís es cierto... salvo una cosa: la crisis del aglgodón en los '90 (la de la segunda mitad) se da después de una expansión fabulosa de la cosecha mecánica (que se da en el boom del algodón en la primera mitad de la década).

Mirá, charlando con productores grandes (porque en este punto tenés razón, los más chicos, todavía parece que se aferran como pueden al algodón) los tipos te dicen que comparado con el algodón, los rindes y los márgenes de la soja, ganan por goleada.

Y más allá de todo... el problema del desplazamiento es percibido (incluso por el estado pronvicial) como muy relevante y preocupante...

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